Baberos de ositos junto a consoladores de variados tamaños. La tienda de Rafael S.N. en Cala Millor era un bazar con género muy diverso, pero lo que enfureció a las madres que compraban allí fue la aparición de una estantería llena de artículos pornográficos. La Guardia Civil ha retirado esos productos y ha detenido al propietario, por los delitos de exhibicionismo y provocación.
El empresario, al ser arrestado, aseguró que no había reparado en que estaba incurriendo en un delito, y quitó importancia al incidente. Para algunas mujeres que visitaron su negocio la visión de aquellas muñecas hinchables al lado de la ropa infantil las escandalizó y provocó reacciones airadas. Muchas de ellas se pusieron en contacto con el cuartel de la Benemérita de Manacor, vía teléfono o en persona, y exigieron que los agentes tomaran cartas en el asunto. Recientemente, la Policía Judicial de Manacor visitó la tienda de Cala Millor y confirmó las sospechas. A la vista de todos los clientes y de los niños había una treintena de vibradores de colores y tamaños variados, fotografías de actores y actrices porno y otros artilugios de placer. Durante la inspección del local se encontraron unos bolígrafos que ocultaban un estilete en el interior, y también fueron retirados por estar prohibidos.
Rafael S., de 36 años, fue detenido y en su declaración aseguró que no había tenido intención de herir la sensibilidad de nadie. Tras ser informado de los cargos que pesaban sobre él quedó en libertad, y ayer fue sometido a un juicio rápido en Manacor. El caso de este empresario no es el único que se ha detectado en la comarca y en los próximos días la Guardia Civil visitará algunos establecimientos que tienen a la venta efectos pornográficos sin la correspondiente licencia. En ciertos souvenirs se venden objetos «picantes» confundiéndolos con otros de broma, y la Benemérita va a incrementar el control sobre este tipo de artículos. Ha declarado la guerra a la pornografía no autorizada.