Juan Ramón Beltrà no quiere ser pesimista ni perder la esperanza de encontrar a su hijo, Marc, que entre finales de 2003 y principios de 2004 fue visto en el Amazonas. Desde entonces el joven, nacido en Mallorca y profesor de filología en la universidad Javeriana de Bogotá, está oficialmente desaparecido. Su padre se ha desplazado en dos ocasiones a la zona y en la última regresó a la Isla a principios de septiembre. Si al principio del viaje las previsiones eran optimistas porque se hablaba de una serie de pistas fiables sobre el paradero de Marc, por desgracia dichas previsiones no se cumplieron y Juan Ramón regresó a Mallorca de vacío.
Pero el hombre no se quiere dar por vencido y está dispuesto a efectuar otro viaje. Lo último que sabe, a nivel de rumor, de simple rumor, es que Marc podría haber sido visto en una zona que se denomina El Encanto, al norte de Leticia, en Colombia. Se trata de un terreno «muy complicado» puesto que allí está la guerrilla. El hombre no dispone de recursos económicos para costearse todo lo que implica el viaje, por lo que está pensando la manera de poder financiarlo. El pasado año fue recibido por el ministro Moratinos, que le prometió toda la ayuda posible para localizar a Marc. Pero Juan Ramón dice que todo han sido buenas palabras, pero al final no se han traducido en el esfuerzo que él y toda la familia esperaban para, por lo menos, intentar localizar a Marc.
En la última información que se dio desde estas páginas se dijo que en el Amazonas se había encontrado parte de las pertenencias que llevaba Marc, y que la expedición en la que estaba su padre seguía en el intento de encontrar alguna buena pista de Marc.
Hoy, más de un año después de que el joven se adentrara en el Amazonas con la intención, entre otras razones, de conocer el pueblo de Benjamín Constant, que lleva el nombre de un escritor francés admirado por Marc, la familia tiene un rumor sobre su paradero y su padre quiere agotar todas las posibilidades para encontrarlo.