A eso de las 13.00 horas la familia circulaba por el Camí Fondo a bordo de un Renault Clío con placas de matrícula PM-2066-BN, que conducía Ramón Molina Guerrero, de 72 años. A la altura del cruce con la carretera de Son Ferriol, muy cerca de una gran superficie comercial, el turismo se incorporó a la vía sin advertir que pasaba en ese momento un camión de reparto de alimentos, pilotado por Luis Miguel F. El chófer no pudo frenar a tiempo y se llevó por delante al coche.
El habitáculo del conductor fue el que se llevó la peor parte y Ramón Molina falleció prácticamente en el acto, mientras el resto de su familia sufría lesiones de distinta consideración. Su esposa Manuela Moreno Lozas, de 65 años y que al parecer viajaba en la parte delantera con él, resultó con lesión torácica y golpes en las piernas y la cabeza. Su estado era grave. En la parte trasera iban la hija, de 36 años, y la nieta, de 3, que también resultaron policontusionadas, aunque de menor consideración.
El Renault Clío, que fue arrastrado varios metros por el camión, quedó desencajado y los minutos siguientes, en aquel tramo de la carretera, fueron de drama y caos. La Policía Local, el subsector de Tráfico de la Guardia Civil, bomberos, Ambulancias Insulares y el 061 se desplazaron hasta el cruce del Camí Fondo con la carretera de Son Ferriol. La primera prioridad fue rescatar a los heridos atrapados y luego, una vez estabilizados sus respectivos estados, la abuela, la hija y la nieta fueron evacuadas hasta Son Dureta y la clínica Juaneda.
El chófer del camión, que estaba muy afectado por lo ocurrido, fue atendido de lesiones leves y el juzgado de instrucción número 7, que ayer se encontraba en funciones de guardia, fue informado del fallecimiento. La Benemérita, por su parte, ultimó el informe sobre el siniestro.