Cuatro aviones del Ejército del Aire, cargados con más de una decena de toneladas de productos de primera necesidad y con unos 60 militares a bordo, despegaron ayer de la base aérea de Getafe hacia Indonesia. El ministro de Defensa, José Bono, junto con el jefe del Estado Mayor de la Defensa, el general Félix Sanz Roldán, y el jefe del Estado Mayor del Aire, el general José García de la Vega, despidieron al primer contingente de la operación «Respuesta Solidaria», que llegará al aeropuerto de Medam, en el norte de Sumatra, el próximo jueves.
Desde las pistas de la base de Getafe despegaron de forma sucesiva tres aviones de carga CASA-235, que se quedarán en Indonesia, y un Hércules C-130, que regresará a España tras dejar el material que transportan. Otro Hércules cuya salida estaba prevista también para las 19:00 horas y en el que viajarán unos 30 militares, tuvo que retrasar el despegue debido a problemas técnicos. Los cinco aviones transportarán una carga total de dieciocho toneladas de ayuda humanitaria y 90 efectivos militares. Entre la ayuda humanitaria se encuentra una depuradora de agua de 8.000 litros a la hora, medicamentos, agua embotellada y 7.000 raciones de alimentos de primera necesidad.
De los 90 militares que se desplazarán a Indonesia, más de 60 son del Ejército del Aire y, concretamente, de la EADA y de los grupos 31 (Zaragoza) y 35 (Getafe). El resto de los efectivos pertenecen al Ejército de Tierra, fundamentalmente a la unidad de Ingenieros de Salamanca, que se encargarán de activar la potabilizadora. En su despedida a los militares, comandados por el teniente coronel Luis Gómez Guillamón, el ministro les dijo que llevan en los aviones «el sentimiento de solidaridad que quiere la sociedad española». «Son muchos los españoles que ven a niños sufriendo y quieren hacer algo» y «esto es lo que van a hacer los soldados».