Agentes de la Unidad Nocturna de la Policía Local de Palma intervinieron en la madrugada del pasado jueves unos 300 gramos de hachís en un bar de Palma y varios gramos de cocaína. Los vecinos de la zona habían informado sobre la presencia en el bar de personas «conflictivas» y que se consumían sustancias estupefacientes. Por ello, los agentes realizaron varias identificaciones a clientes y a la camarera, que portaba pequeñas cantidades de droga. En un momento dado, los policías pidieron la documentación del bar al dueño, quien con gran nerviosismo insistió en pasar detrás de la barra del local.
Los agentes, intuyendo que quería ocultarles algo, realizaron una pequeña inspección y localizaron una caja con diversos trozos de hachís, aunque el propietario aseguró que eran para consumo propio. Los policías realizaron una nueva inspección, descubriendo esta vez una caja que contenía abundantes trozos de hachís, unos 1.000 euros y varios gramos de una sustancia que parecía ser cocaína, en una lata. Los policías detuvieron al dueño del bar, de 40 años de edad, y a la camarera de 30, que resultó ser su ex compañera sentimental, por un presunto delito de tráfico de drogas. Además, se procedió al cierre y custodia del local.