La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha absuelto a José J.F. de la C., un empresario que estaba acusado de estafar a sus socios 165.000 euros en las obras de demolición del hotel César, en Cala Major, y para quien pedían cinco años de prisión. Según la acusación, el constructor confeccionaba facturas falsas que luego cobraba después de incluirlas en falsos presupuestos que presentaba a otra empresa administrada por él mismo y por uno de los demandantes. La empresa «ficticia» tenía el nombre de Accord Derribos S.C.L., un nombre presuntamente plagiado de otra empresa palmesana.
En el fallo, el Tribunal desvirtúa el valor de las pruebas aportadas por la acusación (las presuntas facturas falsas presentadas por el constructor) «puesto que no llevan firma alguna y son simples fotocopias».
El Tribunal reconoce que estas fotocopias «pueden parecer sospechosas por la dicción de la empresa emisora y por el domicilio que figura en su membrete, coincidente con el de la localidad menorquina donde residió el acusado tiempo atrás», aunque recuerdan que esta sospecha no es suficiente para «desvanecer» el principio de presunción de inocencia del acusado, defendido por el letrado Miguel Ill Ferrer.
La sentencia también resalta la «vehemencia y falta de vacilaciones» del acusado en su declaración ante el Tribunal.