Los técnicos investigan las causas que originaron el incendio, que la noche del pasado jueves se declaró en la ferretería ubicada en la calle Pollentia, en Alcúdia. Su propietario, Juan García, se encuentra muy afectado al tratarse de un negocio familiar con 30 años de antigüedad. Juan García asegura que no hizo ningún comentario referente a que antes de cerrar notó que el contador estaba 'algo caliente', porque al avisarle de que había comenzado el fuego sufrió una crisis y esto, unido a que padece una afección cardiaca, hizo que recibiera tratamiento urgente en una Uvi móvil y después en el PAC de Alcúdia.
También, por el momento se ha demostrado que las bombonas de gas estaban situadas en un anexo del local, y que dicha ubicación tenía todos los permisos necesarios.
Con respecto al cloro que había en el local, se aclara que se trataba de pastillas de cloro para las piscinas. En definitiva, por el momento todo apunta a que el orígen del fuego fue un desgraciado accidente, y en ellos están trabajando los técnicos.
Además del propietario del local, también necesitó asistencia médica un bombero que trabajaba en la extinción, al sufrir una ligera intoxicación por humo que, por fortuna, no tuvo mayores consecuencias.