G.P./MICHELS
La autopsia practicada ayer por la mañana al cadáver de la niña de
cuatro años que murió al ser atacada en Llucmajor por dos perros
determinó que la causa inmediata de la muerte fue un shock
traumático, consecuencia de la gran pérdida de sangre por las
graves mordeduras de los dos animales. Los resultados de la
autopsia fueron remitidos al Juzgado de Instrucción Número 7 de
Palma, que investiga el caso. La pequeña Rosana Mercadal Ramírez
falleció el pasado viernes tras ser atacada por dos perros en casa
de sus tíos, ubicada en la carretera de Llucmajor a Algaida.
Los restos de la pequeña fueron incinerados y serán trasladados a Formentera, donde residen los padres. Rosana fue atacada de forma súbita por dos perros de la casa, un «ca de bestiar» cruzado y un mastín mezclado sin que su tía, que la acompañaba en esos momentos, pudiera hacer nada por librarla de los mordiscos de los dos animales, que hasta entonces no habían mostrado signos de comportamiento agresivo.
El traslado de la víctima hasta el hospital Son Llàtzer de Palma se llevó a cabo en un turismo propiedad de los tíos de la pequeña, conducido por un camionero de una empresa de transportes de Llucmajor a quien la tía de la niña pidió auxilio y contó con la ayuda de la Guardia Civil, que abrió paso entre el tráfico al vehículo, pese a lo cual la pequeña llegó sin vida al centro sanitario.