La autopista de Andratx y Porto Pi fueron escenario ayer, con dos horas de diferencia, de dos accidentes de tráfico muy aparatosos. Pese a la espectacularidad de los siniestros, sólo se registraron heridos leves.
A las seis de la mañana un joven de 31 años, llamado Bartolomé Moll Ferragut, que circulaba por la autopista de Andratx en dirección a Palmanova, se quedó aparentemente dormido al volante. Su turismo, un Rover, pasó al carril contrario y a la altura del kilómetro 13-500 se subió a un guardarraíl y se estrelló contra un pino. Los equipos de emergencia se pusieron rápidamente en marcha y hasta aquel tramo acudieron varias patrullas de la Policía Local de Calvià, Guardia Civil y una ambulancia del 061. El estado del conductor no era preocupante y luego se supo que era uno de los patrones de los dos barcos que limpian la costa en Andratx durante este verano.
El otro siniestro aconteció dos horas después, en el comienzo de la autopista de Andratx, a la altura de Porto Pi. Una mujer de unos 40 años, que pilotaba un Peugeot 206, perdió el control después de que un camión la adelantara, en dirección a la autopista, e invadió el carril contrario, por donde circulaba un Renault 19. El choque frontal fue tremendo, pero la señora sólo resultó herida en una pierna y el otro conductor tampoco sufrió lesiones de gravedad. Los dos implicados fueron atendidos en el hospital.