El fiscal pide dos años de prisión y cuatro de inhabilitación para L.E.A.C., un médico acusado de un delito de lesiones imprudentes cometido sobre una paciente, a la que en 1997 sometió a una operación de cirugía estética para reducirle los pechos.
Según la versión de la mujer, en noviembre de 1996 decidió acudir a una consulta ginecológica al despacho del acusado, quien le realizó una exploración, explicándole que tenía los pechos caídos y que podría «arreglárselos» mediante una mamoplastia de reducción. La mujer aceptó y la operación se llevó a a cabo en una clínica de Palma el 9 de mayo de 1997. A lo largo de los días siguientes, la mujer se dio cuenta de las graves secuelas de la operación. Entre ellas, figura una cicatriz de 19 centímetros en la mama derecha y otra de 17 centímetros en la izquierda, que además presenta una curva hacia la izquierda en forma de «s». Por otra parte, las areolas mamarias y los pezones presentan «importantes deficiencias estéticas», entre las que se encuentran decaimientos, deformidades y varias desproporciones, así como una importante asimetría entre ambos pechos.
Tras la operación, la mujer padeció además un fuerte trastorno depresivo que requirió tratamiento farmacológico y psicológico, y que conllevó, según la acusada, la destrucción de la relación que mantenía con su pareja estable, así como la imposibilidad de establecer otra relación, e incluso de tener hijos.
Por ello, además de la pena de cárcel, el Ministerio Fiscal solicita 150.000 euros de indemnización.