«No perdemos la esperanza, pero necesitamos ayuda». Los padres de Ana Eva Guasch y Miquel Àngel Valls, los dos mallorquines desaparecidos, se reunieron en la mañana de ayer con Ramon Socias, delegado del Gobierno, y le pidieron una mayor «coordinación» entre los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para conseguir mejores resultados en las investigaciones de esta índole.
María Isabel Melis y Vicente Guasch, los padres de Ana Eva, y Andreu Valls, el progenitor de Miquel Àngel, pusieron a Socías al corriente de sus respectivos casos y el delegado, por su parte, les explicó que las indagaciones policiales siguen adelante y que hay un agente que se dedica exclusivamente a averiguar que les pasó a los dos jóvenes. María Isabel Melis, que al igual que los otros familiares mencionados pertenece a la asociación Inter-SOS, con sede en Catalunya y cuyo objetivo es buscar a personas desaparecidas, destacó que en España hay 14.000 personas de las que no se tienen noticias y otras 4.000 cadáveres que están pendientes de identificación. «Continuamos manteniendo la esperanza de volver a ver a nuestros hijos, pero es verdad que hay días en los que te derrumbas. No nos queda otra salida que seguir adelante», añadió.
El delegado del Gobierno, tal y como hicieron sus antecesores, Catalina Cirer y Miquel Ramis, mostró a las dos familias su solidaridad y apoyo, y se comprometió a trabajar para que las dos ausencias no caigan en el olvido. Por su parte, los afectados reclamaron que sería «muy positivo» que los medios de comunicación, en especial la televisión, llevaran a cabo un programa «serio» sobre desaparecidos, para que los ciudadanos pudieran colaborar y llamar si recordaban algún detalle importante.