La calle Eusebio Estada de Palma, sobre todo en las proximidades de la Plaza de España, está registrando una inseguridad inusitada en los últimos días. Una farmacia y un local de pollos al ast han sido atracados por un individuo armado con una pistola y un coche de la Policía Local, que intervenía en una riña, fue víctima de un hurto. Esta situación ha alarmado a vecinos y comerciantes, que piden una mayor presencia policial, tanto de día como de noche.
La farmacia está ubicada en el número 60 de esa calle y el atracador, que casi con seguridad es el mismo que actuó luego en la pollería, entró cuando no había clientes en el interior. Con el rostro semioculto esgrimió un arma de fuego -que según la policía podría ser de fogueo- y exigió que le entregaran todo el dinero de la caja. Sin embargo, el delincuente se puso nervioso y al final escapó sin obtener botín alguno. Ayer este periódico se puso en contacto con la farmacia y una encargada confirmó el atraco, aunque no quiso facilitar más detalles «porque todavía no se lo hemos contado a nuestras familias y no queremos que se asusten».
El local de pollos, por su parte, está emplazado en el número 113 de esa calle, no muy lejos de la farmacia, y las circunstancias del atraco fueron similares. Un hombre de mediana edad, también tocado por una gorra, y que empuñaba un arma de fuego, encañonó al empleado y se apoderó de unos 450 euros. El Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía ha abierto una investigación para localizar al hampón, que de momento sigue sin ser identificado. Los agentes se entrevistaron con las víctimas de los atracos para intentar confeccionar un retrato robot del sospechoso y concretar su vestimenta y rasgos físicos.