El teniente de alcalde de Urbanisme de Cort, Javier Rodrigo de Santos, negó ayer con rotundidad que el Consistorio tenga ningún tipo de responsabilidad en el accidente ocurrido el pasado jueves en Establiments. Cabe recordar que una voladura realizada en la cantera de Can Rosselló alcanzó una casa vecina, en donde produjo importantes daños materiales, aunque afortunadamente no causó ninguno personal.
Rodrigo de Santos, que quiso en primer lugar manifestar su solidaridad con la familia afectada, adelantó que el propio Ajuntament se personará ante la Justicia para denunciar los hechos.
La Conselleria d'Indústria, por su parte, ha paralizado de manera cautelar la actividad extractiva en la cantera de Can Rosselló y ha abierto una investigación.
Las canteras de Establiments llevan ya varias décadas funcionando sin disponer de las licencias pertinentes. De hecho, hasta ahora existen cuatro resoluciones judiciales exigiendo su cierre. Además, en los años noventa se aprobaron distintos acuerdos plenarios en Cort abogando por un arreglo a esta situación, que hasta ahora no se ha producido.
Rodrigo de Santos recordó ayer que en estos momentos se está tramitando la licencia de actividad de la empresa explotadora y añadió que Cort «no tiene potestad para clausurar la cantera, ni siquiera tras el accidente». Ello sería debido a que «la Conselleria de Medi Ambient informó favorablemente, el 23 de abril de 2003, la fase uno del proyecto de modificación conjunta del plan de restauración de las canteras Garrigueta Rassa y Can Rosselló».