C.VENY/E.DÀVILA/G.PICÓ
Una de las seis personas que ingresaron en hospitales tras
descarrilar el sábado por la noche el tren de Manacor fue dada de
alta ayer, mientras que las otras cinco evolucionan favorablemente.
El tren accidentado, entre las estaciones de Sineu y Petra, fue
retirado de la vía y trasladado ayer hasta las instalaciones de
Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) de Son Rullán, en Palma. El
servicio de trenes entre Inca y Manacor ha quedado interrumpido de
forma permanente hasta que se revise y mejore la vía, y se ha
habilitado un servicio de transporte regular por carretera para
cubrir este trayecto. Los trenes entre Palma-Marratxí, Palma-Inca e
Inca-sa Pobla y viceversa siguen funcionando con normalidad.
Ayer por la mañana fue dado de alta un hombre de 74 años que fue ingresado en el hospital de Muro. Este pasajero sufrió un traumatismo lumbar de pronóstico leve. Su mujer, de 75 años, se lesionó un pie y no hizo falta que quedase ingresada, aunque ha estado en el hospital junto a su marido estos dos días. Ambos abandonaron ayer el centro, en el que sigue ingresada una vecina de Manacor de 72 años. La mujer, que se llama Joana, sufre un traumatismo torácico y se lesionó una rodilla, un hombro y el brazo derecho. Ayer explicó a Ultima Hora que venía de Palma «con seis amigos de ver Siete Novias Para Siete Hermanos en el Auditòrium. Íbamos en el tren tranquilamente y notamos una fuerte sacudida, estaba sentada en un asiento plegable y caímos todos hacia la izquierda, uno encima de otro. Después me mareé y recuerdo que un chico joven estaba muy pendiente de mí, y los bomberos y la gente que nos atendió se portaron muy bien», indicó.
El doctor Rafael Cantarero del hospital de Muro destacó que estas personas han recibido ayuda psicológica por precaución, pero afirmó que todas ellas se encuentran bien y agregó que Joana será dada de alta hoy o mañana como muy tarde. En el hospital de Manacor sigue ingresada otra vecina del municipio, Bàrbara Fullana, de 69 años, que también viajaba en el tren. Su hijo explicó que «evoluciona favorablemente, pero tiene que estar en reposo absoluto» ya que tiene varias costillas rotas. Bàrbara permanecerá todavía unos días más hospitalizada pero aseguró que volverá «a utilizar el tren cuando esté bien». «Nos llevamos un susto muy grande, pero cuando frenó de forma brusca y se fue la luz todos nos dimos cuenta de que era un accidente», dijo.