AGENCIAS-VIRGINIA
La Guardia Costera de Estados Unidos inició la búsqueda de 18
marineros desaparecidos después de que el buque en que viajaban
explotara y se hundiera frente a las costas de Virginia, dejando a
tres de sus tripulantes muertos.
Seis personas consiguieron escapar en un bote y fueron rescatadas por los equipos de salvamento.
Varios helicópteros, un avión C-130 y numerosas embarcaciones participan en las operaciones de rescate, pero las esperanzas de encontrar a otros sobrevivientes disminuyen a medida que pasa el tiempo, pues el agua está a una temperatura de unos siete grados.
El suceso se produjo el sábado por la tarde al este del parque natural de Chincoteague. Se trataba de un buque cisterna con 11.000 toneladas de etanol, llamado «Bow Mariner», de 39.000 toneladas de peso y unos 175 metros de eslora.
La embarcación viajaba con bandera de Singapur de Nueva York a Houston, y su tripulación consistía en 24 filipinos y tres griegos, según informaron fuentes de la empresa noruega Odfjell Seachem, que lo poseía.
Una de las personas rescatadas se encontraba ayer ingresada en condición crítica, dos se encontraban en condición grave y los otros tres fueron dados de alta ayer, según indicó a los medios de comunicación un portavoz del hospital de Norfolk a donde fueron trasladados los seis tripulantes que lograron escapar en un bote y fueron rescatados por los servicios de emergencia.