El juicio contra un joven marroquí acusado de intentar matar a una pareja en Sóller en mayo del año pasado quedó ayer visto para sentencia. La fiscal solicitó una pena de 21 años de cárcel para el acusado por dos intentos de homicidio y amenazas. La acusación particular solicitó ante el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma una condena de 22 años de cárcel por los mismos motivos, mientras que el abogado defensor pidió que sea absuelto o como mucho se le considere culpable de un delito y una falta de lesiones.
El letrado defensor pidió también que se anulase el juicio ya que no se han cumplido las garantías procesales del acusado durante la instrucción del caso, petición a la que se negaron rotundamente tanto la fiscal como la acusación particular. Los hechos ocurrieron en Sóller y las víctimas son la ex compañera del acusado y la pareja de ésta. Según la fiscal y la acusación particular, el acusado embistió con su vehículo al hombre en el cruce de la carretera de Sóller al Port con la calle Cetre. Lo tiró al suelo e intentó embestirlo dos veces más. El hombre se pudo refugiar en un montículo de tierra junto a la mujer y el acusado intentó arrollarlos de nuevo «con la intención de matarlos». Después los agredió con una barra de hierro y huyó.
El acusado ha negado en todo momento que tuviese intención de matar a la pareja y explicó que atropelló al compañero de su ex novia cuando se incorporaba a poca velocidad a la carretera e iba mirando por el retrovisor. La defensa consideró «desproporcionada la pena de 21 años», destacó que no hubo lesiones «que pusiesen en peligro la vida de las víctimas» y pidió su absolución.