El mes de octubre se despidió con un temporal de viento que estuvo acompañado de lluvia a partir de las 14.00 horas y provocó cuantiosos daños materiales, especialmente en la costa de Palma y Calvià. Cuatro personas resultaron heridas -dos de ellas al caer al mar, otra al caerle encima trozos de un cristal de una ventana y una cuarta por la rama de un árbol- y fueron trasladadas a hospitales. La Direcció General d'Emergències del Govern balear anunció que entre las 10.00 y las 12.00 horas de la mañana de hoy pueden registrarse nuevas rachas fuertes de viento, aunque de menor intensidad, pero aconseja a los ciudadanos que prevén visitar a los cementerios que no lo hagan en este intervalo de tiempo.
La borrasca entró en Balears por el puerto de la Savina, en Formentera, y después se desplazó hacia Mallorca, donde entró por la zona entre sa Dragonera y Estellencs, y fue hacia Palma, explicó el director general d'Emergències, Joan Pol. En estas dos islas hubo a lo largo de la mañana rachas de viento sostenido de 80 kilómetros a la hora, que alcanzaron los 100 kilómetros en Alfàbia y el Aeropuerto de Eivissa. En Menorca, las rachas fueron mucho menores. El vendaval obligó a cerrar los puertos de Balears y provocó el retraso de decenas de vuelos en los distintos aeropuertos de las islas.