JAVIER JIMÉNEZ-PEP MATAS
Los investigadores del Grupo de Homicidios y del SAF (Servicio de
Asistencia a la Familia) enviaron a un laboratorio de Madrid dos
jerseys con restos de semen y unos cigarrillos de idéntica marca
que, tras ser sometidos a las pruebas del ADN, desvelaron que eran
de la misma persona. De esta manera, el cerco se fue estrechando y
la semana pasada se efectuaron importantes avances, que ahora han
culminado con la detención del presunto violador de niñas.
Las diligencias, con todo, no han concluido y la policía está recabando indicios contra el individuo. También está previsto que en las próximas horas se efectúe una rueda de reconocimiento con algunas de las niñas víctimas de los abusos, para que identifiquen o no al sospechoso.
Desde que este periódico informó de que una decena de niñas había sido atacadas sexualmente por el mismo hombre en Palma se ha desatado una auténtica psicosis y la policía y la Guardia Civil han recibido, en pocas semanas, más de 30 llamadas de particulares asegurando que habían visto en algún lugar de la Isla al hombre que aparecía en el retrato robot.
Todas aquellas denuncias fueron comprobadas, pero sin éxito. El modus operandi del sujeto era siempre similar y ese mismo patrón permitió también avances en la investigación.