La situación actual de la inseguridad, los datos de la campaña estival y las propuestas y perspectivas de futuro, fueron el eje del debate, ayer, en las I Jornadas de Seguridad de la Platja de Palma.
A las diez de la mañana comenzó el acto, en el auditóriun de la Asociación de Hoteleros, organizado por la Delegación del Gobierno en colaboración con la Asociación Hotelera de la Platja de Palma. El presidente del citado colectivo, Jordi Cabrer, dio la bienvenida a los asistentes y la apertura corrió a cargo de Miquel Angel Ramis, delegado del Gobierno en Balears. Después se ofrecieron los datos relativos a la seguridad por parte de los mandos y máximos responsables de los distintos cuerpos presentes: Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil, Policía Local de Palma y Policía Local de Llucmajor.
A continuación, estos mismos datos se ofrecieron en 'versión' de los responsables de la Asociación de Hoteleros, de la Asociación de Vecinos de Platja de Palma, de la Plataforma Antidelincuencia y de la Asociación de Vecinos de Cala Estancia. Ana Rodríguez, portavoz de la Plataforma Antidelincuencia, fue especialmente critica con la inseguridad en la zona. Los mismos responsables de los colectivos citados hicieron propuestas de futuro. El cierre del acto corrió a cargo de Catalina Cirer, alcaldesa de Palma y Lluc Tomás, alcalde de Llucmajor.
Cirer recordó su compromiso de hacer todo lo posible para que haya seguridad y dijo que «no me cabe en la cabeza que un vecino me diga que no puede pasar a según que horas por ciertos lugares por miedo. Esto no se puede permitir y haremos lo necesario para que no ocurra». Cirer reafirmó su plena confianza en los cuerpos policiales y recordó que el problema de la inseguridad «no es sólo competencia policial». Lluc Tomás apoyó el discurso de Cirer y dijo que, pese a que la zona «está dividida por un torrente, hay que trabajar juntos».