El fuego que comenzó el viernes al mediodía y que ha arrasado entre 120 y 130 hectáreas de las faldas, ladera y cima del Puig de Randa y el Santueri de Cura no se considerará extinguido al cien por cien hasta última hora de mañana martes, si no surgen contrariedades, según explicó el Director de Extinción de Incendios del Govern balear, Tomeu Llabrés quien ayer permanecía en el punto de control montado en Cura.
Mientras, todos los efectivos aéreos (hidroavión, helicóptero, aviones) estaban en sus bases «en stand by por si acaso», explicó Llabrés. Sobre el terreno trabajaban ayer 3 brigadas, 3 camiones, una dotación de bomberos, efectivos de Protecció Civil, un avión de vigilancia y camiones «cuba» particulares que llevaban a cabo el control de algunos «puntos calientes que se tienen que ir apagando como troncos y otros restos». Muchos curiosos y turistas ascendieron a lo largo del día de ayer al santueri para ver el dantesco espectáculo.
Sobre las causas del incendio más grave que ha sufrido la isla en lo que va de año, Llabrés explicó que aún no se conocen ya que las investigaciones comenzarán cuando el incendio esté extinguido.