Los clientes de una entidad bancaria de Cales de Mallorca, en Manacor, no podían sospechar que sus indicaciones en el cajero automático estaban siendo grabadas con una microcámara y que luego eran enviadas a un monitor, que vigilaban tres delincuentes rumanos que han sido detenidos por la UTC (Unidad Territorial de Costas).
Los agentes habían recibido numerosas denuncias por duplicados de tarjetas de crédito en ese banco y llegaron a la conclusión de que una banda lo estaba controlando. El pasado lunes los funcionarios policiales montaron un discreto dispositivo y detectaron a dos de los sospechosos apostados en la calle, expectantes. Los otros dos estaban en el interior de un coche, también atentos a los movimientos en el cajero. V.N., de 23 años; T.A., de 20; A.C.T., de 26; y R.M.I., de 22, fueron 'cazados' sin dejarles tiempo a reaccionar. En su poder se halló el monitor y otros artilugios informáticos, mientras que la microcámara apareció camuflada en el techo del cajero, justo encima de la máquina expendedora de billetes.
Con las grabaciones sabían cuál era el número secreto de las tarjetas y luego, recuperando el resguardo que los clientes tiraban a la papelera, conseguían hacer duplicados y utilizarlas de forma fraudulenta. Ahora, la UTC ha conseguido desmantelar esta mafia.