Una jurista del Govern está a punto de concluir la investigación sobre las irregularidades económicas descubiertas en el Ajuntament de Sóller, cometidas presuntamente por un funcionario. Al parecer, este trabajador municipal se fue apoderando de dinero que recaudaba para el Ajuntament a lo largo de un periodo de unos cinco años. El ex alcalde Ramon Socías, máximo responsable del Consistorio cuando se cometió esta malversación, ha manifestado que nadie le informó de estas irregularidades, y cuando tuvo noticias de ello lo comunicó de inmediato al Govern.
La letrada que está investigando los hechos está a punto de concluir su investigación. Sus conclusiones las entregará al actual alcalde, Carles Simarro, que será quien decida las medidas que deben adoptarse.
Uno de los datos que más ha llamado la atención es que los responsables de recaudación del Ajuntament no se dieran cuenta de este desfase económico, ya que de alguna forma debieron detectar que se ingresaba dinero y no entraba en las arcas municipales.
Según parece, el funcionario sospechoso, además de un delito de malversación, cuya cifra concreta todavía no se ha determinado, también podría ser acusado de un delito de falsificación.