El director general de la Guardia Civil, Santiago López Valdivielso, solicitó un informe psicológico y psiquiátrico del ex jefe de la Comandancia de Albacete, Antonio Peñafiel, al observar en él diversas conductas irregulares y pidió que sin demora se le retiraran las armas personales y profesionales.
Así lo manifestó Valdivielso al comparecer ante los medios de comunicación, junto al ministro del Interior, Angel Acebes, para explicar el suceso ocurrido en la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete. Acebes, quien lamentó esta «tragedia» y expresó su solidaridad con la familia de los dos fallecidos y del herido Antonio Lázaro, jefe de la Comandancia, explicó que Peñafiel realizó los disparos tras hacerse con un arma del comandante del puesto. El titular de Interior explicó que Peñafiel fue nombrado el 7 de noviembre de 2001 jefe de la comandancia y que ya en 2002 fueron llegando a través de diversos cauces informaciones sobre la «falta de idoneidad» y de condiciones para desarrollar las funciones de su puesto.
A pesar de las «reiteradas» llamadas de atención, Peñafiel mantenía sus actitudes y el 7 de noviembre del año pasado el general jefe de la zona de Castilla-La Mancha, Juan Carlos Rodríguez Búrdalo, solicitó una información previa, que concluyó que el entonces jefe de la comandancia ejercía su mando de «forma inadecuada» para las responsabilidades de su destino.