Un incendio en el aparcamiento de la Plaça Major de Palma provocó ayer síntomas leves de intoxicación a dos personas, según confirmaron en fuentes del servicio sanitario del 061.
Uno de los coches aparcados cerca de la entrada del Teatro Principal comenzó a arder minutos antes de las diez de la mañana y en poco tiempo una gran humareda causó la alarma, tanto entre los usuarios como por parte del personal, que temía que las llamas se extendieran a otros vehículos. Fueron precisamente esos empleados quienes, previstos de mangueras y extintores, intentaron controlar el fuego antes de la llegada de los bomberos. Varias dotaciones del parque central, Policía Local, ambulancias y Cuerpo Nacional de Policía se desplazaron hasta el céntrico aparcamiento de Palma y, en primer lugar, atendieron a los dos intoxicados, que se recuperaron enseguida y no fue necesario trasladarlos a ningún hospital.
Los bomberos se encontraron con que el incendio estaba casi sofocado y se limitaron a airear las dependencias con extractores de humo y acabar de enfriar el motor del Opel Vectra, que quedó completamente destruido. El cortocircuito parece ser que se inició en la batería y las altísimas temperaturas que se alcanzaron también afectaron a un Mazda y a un Peugeot, aunque con menor intensidad.