Una española de mediana edad, que reside en una ciudad de Suiza, se ha desplazado a Mallorca después de recibir una llamada telefónica de su madre enferma, que vive en Porto Cristo, en la que le aseguraba que otros familiares la tenían «retenida» y se quedaban con el dinero de su paga de pensionista.
Según han informado en fuentes judiciales, el pasado fin de semana la señora que reside en Suiza consiguió hablar con su madre, que tiene problemas de memoria y su salud es muy delicada, y durante la conversación la mujer de mayor edad le explicó con todo lujo de detalles que estaba viviendo una situación desesperada.
En su relato explicó que cuando recibía el dinero de su paga mensual no podía hacer uso de él porque el familiar que la «cuidaba» se apoderaba de los fondos. Además, se quejó amargamente de que estaba «retenida» y no podía salir de su casa de Porto Cristo. A pesar del delicado estado de salud de la mujer, su hija le dio veracidad a aquellas palabras y decidió que la única manera de sacarla de la casa era trasladándose a Mallorca e interponiendo una denuncia.
La residente en Suiza se ha alojado durante estos días en un hotel de Santa Ponça, pero ha permanecido mañana y tarde en Manacor, realizando gestiones en el juzgado y ante la Policía Local. Un médico ha examinado a la denunciante, de unos 70 años, y está evaluando cuál es su estado físico y psicológico. De momento, sus testimonios son coherentes y no se han apreciado indicios de que fabule o se invente ciertas historias. Su hija, cuya identidad no ha sido facilitada, ha insistido ante la autoridad judicial en que la única solución para su madre es que quede ingresada en una residencia en la que pueda recibir asistencia adecuada y esté cuidada las 24 horas del día.