Vivo de milagro. José Antonio Tenza Hurtado, un jefe de obra de 50 años, fue hospitalizado ayer en Palma con lesiones de escasa consideración tras una brutal caída a un agujero de 15 metros de profundidad en la calle Cabana de Marratxí.
El nuevo accidente laboral ocurrió minutos antes de las siete de la mañana, cuando el operario resbaló y se precipitó al interior del pozo, que tiene un diámetro de un metro y se realiza para soterrar el paso a nivel de la estación de tren del Pont d'Inca. Los compañeros de la víctima dieron la voz de alarma y una dotación de los bomberos, Policía Local de Marratxí y una ambulancia se desplazaron con urgencia hasta esa dirección. Los bomberos instalaron un trípode y con un arnés consiguieron subir al herido, que asombrosamente estaba consciente y su estado no era preocupante.
Por otra parte, a primera hora de la tarde se produjo un segundo accidente laboral en el Hospital Psiquiátrico de Palma, donde un obrero cayó desde un andamio de tres metros de altura y se fracturó, al menos, una de las costillas.