C. VENY/G. PICÓ
Una madre, su hijo de cinco años y un bebé resultaron intoxicados
en Manacor al incendiarse su vivienda y tuvieron que ser
trasladados al hospital del municipio. El fuego se inició sobre las
doce y veinte de ayer en un tercer piso de la calle Llaurador, que
quedó completamente destrozado. Una mujer que en esos momentos
pasaba por la calle, que no suele ser muy transitada, indicó que
«las llamas salían por la ventana, se veían desde la calle y casi
tocaban el edificio de enfrente».
De inmediato se desplazaron al lugar del suceso varias dotaciones de los Bomberos del Consell de Mallorca y de la Policía Local de Manacor. Los agentes cortaron la calle Francisco Gomila, para evitar el paso de personas y vehículos por la calle Llaudaror. El personal sanitario de una ambulancia asistió en el lugar del suceso a la madre y a sus dos hijos, que resultaron intoxicados leves.
Las labores de extinción se alargaron por espacio de una hora. Cuando el fuego estuvo sofocado los bomberos comprobaron que la finca, de tres pisos de altura, no corría riesgo de derrumbe. El fuego se inició por causas que se investigan y la mujer estaba sola en casa junto a sus dos hijos. Los servicios de emergencia avisaron a su marido y al resto de vecinos de lo sucedido.