El Cos de Bombers de Palma sofocó en la madrugada del lunes al martes dos incendios en las instalaciones de la perrera municipal, en Son Reus, y en un taller de reparación de vehículos del Grupo Roxa, en el polígono de Son Castelló, que presentaban indicios de haber sido intencionados.
De acuerdo con los datos facilitados desde el Ajuntament, el primero de los incendios se declaró en las oficinas de la perrera municipal alrededor de la 1.45 horas, y provocó daños en el archivo, que quedó calcinado, y en un despacho contiguo, afectado por el humo y las elevadas temperaturas. Ningún animal, por fortuna, resultó intoxicado. La Policía Local investiga este suceso porque una de las ventanas del edificio tenía el cristal roto y presentaba muestras de haber sido forzada. El segundo siniestro se registró a las 2.30 horas, en un taller de coches del Grupo Roxa, en el polígono de Son Castelló y afectó a cuatro vehículos.