El juicio contra los cuatro acusados del crimen de los dos chinos de Son Banya quedó ayer visto para sentencia, en el que el fiscal jefe de Balears mantuvo los cargos que planteó inicialmente contra los cuatro acusados, Francisco M.F., Concepción S.S., Juan José D.S. y Jerónimo P.M. Les imputa los delitos de doble asesinato, tráfico de drogas, robo con violencia y tenencia ilícita de armas. Para el primero, el presunto autor material de los dos asesinatos, reclama 55 años de prisión. Para los otros tres el fiscal solicita 47 años de reclusión. En la sesión del miércoles el fiscal retiró los cargos contra la pareja acusada de encubrir el asesinato.
En la sesión de ayer, además de los informes de la acusación y de los abogados defensores, destacó en especial el testimonio de los médicos forenses que realizaron la autopsia a los cadáveres calcinados de los dos asiáticos y que llevaron a cabo el estudio del estado mental de Francisco M.F., conocido con el apodo de «Pancho».
Sobre la autopsia, los forenses Vidal Santos y Juan Luis Poncela señalaron que la víctima You Wubao presentaba una herida de arma de fuego. El proyectil le penetró en el cuello, le atravesó la lengua y le quedó en la mandíbula. Los médicos creen que el asiático no murió tras recibir este disparo, sino que falleció por asfixia al incendiarse la vivienda de Son Banya. Sobre la otra víctima, los forenses confirmaron que el asiático recibió el disparo en la cabeza y murió al instante.
«Pancho» fue sometido, a petición de su abogado, a un examen de su estado mental. El forense señaló que el acusado es una persona con un bajo nivel intelectual, pero que es consciente de sus actos y sabe distinguir entre el bien y el mal. El médico señaló que el acusado colaboró muy poco en las pruebas. En la primera cita médica exigió un refresco para responder a las preguntas. En la segunda tampoco quiso colaborar porque era la hora de comer, mientras que en la tercera visita, realizada hace algunos días, se mostró muy esquivo en las respuestas.