EFE-CHARLOTTE
Un total de 70 de las 80 personas que viajaban a bordo de un avión
de pasajeros turco murieron al estrellarse ayer el aparato en el
sureste del país, declaró el director de las líneas aéreas turcas
(THY), Yusuf Bolayirli. El avión, un RJ-100, en el que viajaba 75
pasajeros, entre ellos tres niños, realizaba un vuelo interno entre
las ciudades de Estambul y Diyarbakir, cuando cayó cerca de esta
última, a más de 900 kilómetros al sur de Ankara.
Según Bolayirli, equipos de la defensa civil y las fuerzas armadas consiguieron rescatar con vida a diez personas, y que una de las dos cajas negras del aparato fue hallada en el lugar del siniestro, cuyo contenido será analizado en un intento de saber las causas del accidente.
Por otra parte, los 21 ocupantes de un avión comercial de pequeño tamaño murieron ayer al estrellarse el aparato pocos después de despegar del aeropuerto de Charlotte, en Carolina del Norte, anunciaron las autoridades. «El avión llevaba 19 pasajeros y dos tripulantes. No hubo supervivientes», declaró Jerry Orr, director de operaciones del aeropuerto, durante una conferencia de prensa, en la que indicó que todo apunta a un accidente. El aparato era un Beech 1900D bimotor turbohélice de la aerolínea Air Midwest.