El guardia civil gay destinado en el cuartel de Vilafranca y su compañero sentimental han hecho unas declaraciones en exclusiva a la revista «Interviú». En el transcurso de la misma dicen que están «muy enamorados» y admiten la posibilidad de adoptar a un niño. El guardia Civil y su compañero declaran que llevan un año y medio viviendo juntos en una casa en Llucmajor. En el reportaje gráfico ambos enseñan unas alianzas, que cuentan que se intercambiaron el día que se inscribieron en el Registro de Parejas de Hecho, en el Govern balear.
A pesar de que ambos aparecen en varias fotografías y de que cuentan detalles de sus vidas, el guardia civil y su compañero insisten en que quieren que se respete su intimidad y hacen hincapié en que se quieren y están enamorados. El agente añade que desde que está destinado en Vilafranca ha notado comportamientos homófobos de algunos de sus compañeros por su condición de homosexual.
En estos momentos el agente está pendiente de que sus mandos le respondan a la petición formal que hizo, solicitando ocupar una vivienda en la casa cuartel de Vilafranca. Como ya se ha informado en este periódico, la convivencia de parejas homosexuales en las casas cuartel se hizo posible gracias a una modificación de la normativa por parte de la Dirección General, y a raíz de la petición que formuló el guardia gay del cuartel de Vilafranca.