Un amplio operativo integrado por equipos de aire y tierra buscó ayer a un hombre que cayó al mar en la costa de Sant Josep durante el temporal. La alarma se activó al recibir una llamada el 112 informando sobre una caída al mar de un hombre sobre las nueve y media de la mañana. El testigo, un vigilante jurado de los establecimientos hoteleros de la zona, manifestó que vio «la figura de un hombre junto al mar y, de repente, ya no estaba, era como si una ola se lo hubiese tragado».
El fuerte viento que reinaba en dicho lugar provocó olas de hasta cuatro metros de altura. Una furgoneta del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (Geas) de la Guardia Civil se situó a escasos metros del lugar en que desapareció la víctima, de unos 35 años de edad. Varios miembros de este cuerpo oteaban incansablemente tanto la costa como el horizonte esperando encontrar alguna pista de la persona desaparecida.
A medida que iban pasando las horas los presagios se tornaban cada vez más pesimistas. Sobre las doce del mediodía el helicóptero del SAR se sumó a las labores de rescate y sobrevoló la zona. En tierra, la unidad del Geas no podía hacer nada, puesto que el mal tiempo le impedía adentrarse en el agua para colaborar en el rastreo.
Cerca de las seis y media de la tarde, y ante la falta de visibilidad, los equipos de rescate se vieron obligados a suspender la búsqueda. Las tareas se reemprenderán a primera hora de la mañana de hoy, con la esperanza de que las condiciones meteorológicas permitan una observación más minuciosa del lugar. En la zona, los restaurantes sufrieron desperfectos por el temporal, que se llevó por delante señales de tráfico y mesas y sillas de las terrazas. También provocó daños en embarcaciones, al igual que pasó en Mallorca. En el Port d'Andratx se hundieron dos catamaranes y otro yate tuvo que ser remolcado casi desde la Avenida Almirante Riera Alemany hasta el club de vela.