Una comisión de la Conselleria de Sanitat acudió ayer a los vestuarios del polideportivo de Campos para averiguar las causas por las que un grupo de jugadores de baloncesto, del club Juventud Mariana de Sóller, resultaran intoxicados por un producto cuya composición se desconoce. El suceso ocurrió el sábado por la tarde cuando los jugadores comenzaron a sentirse mal. Tras suspenderse el encuentro los menores fueron trasladados al hospital de Manacor, pero por la noche fueron dados de alta.
Sin embargo, ayer dos de ellos, Miquel Carreras y Bernat Valls, fueron de nuevo ingresados al sentir un fuerte dolor en el estómago. Ambos están ingresados en observación. El presidente del club de Sóller, Joan Puigserver, acompañado por el entrenador del equipo, Joan Bauçà, mantuvieron ayer tarde una reunión con los padres de los niños para manifestarles su preocupación por lo ocurrido. Según parece, los niños se cambiaron en unos vestuarios antiguos y varios de ellos notaron un fuerte olor.
Durante el encuentro poco a poco fueron sintiéndose mal, algunos se desmayaron y otros vomitaron. El presidente explicó que ha contactado con Sanitat para que estudie el caso y concrete qué sustancia provocó la intoxicación a los jugadores. Puigserver señaló que sus sospechan apuntan a que se trata de un insecticida para matar una plaga de cucarachas, aunque no se sabrá hasta que no se analice la orina y la sangre a los niños más afectados.