La Policía Nacional ha detenido a otras dos personas relacionadas supuestamente con el alijo de 300 kilos de «hachís» intervenido en el interior de un camión que en teoría venía a Palma desde la Península cargado de frutas. Los arrestados en la operación, bautizada con el nombre de «Tutti Fruti» son el conductor del camión, llamado Antonio A.G., de 58 años, su hijo, José Antonio A.B., de 27 y su compañera sentimental María José G.G., también de 27 años y a la que le constan dos detenciones anteriores por tráfico de drogas, explicó ayer un portavoz autorizado del CNP. Desde el pasado mes de marzo, los agentes detectaron los viajes frecuentes que realizaba el primer detenido a bordo del camión de alquiler intervenido, que embarcaba en el buque que hace diariamente el trayecto entre Denia, Eivissa y Palma. Los investigadores centraron sus sospechas en dicho individuo. Poco después comprobaron que tiene una frutería en Muro. Sin embargo, el vehículo carecía de cualquier tipo de refrigeración para el transporte de frutas.
El pasado miércoles, la Policía tuvo conocimiento de que el principal sospechoso embarcó en Denia con destino a Palma. A la llegada del buque, los agentes interceptaron el vehículo y realizaron un registro exhaustivo de la mercancia que transportaba en el interior de la caja, que eran unos mil kilos de limones y 400 de naranjas en estado de putrefacción para impedir que los perros detectasen la droga.
Debajo de las cajas que contenían los frutos en mal estado se hallaron un total de diez fardos, siete de los cuales contenían «hachís» y los tres restantes semilla de polen de la misma planta, por un peso de más de 300 kilogramos.
Horas después de la intervención se procedió a la detención del hijo del principal inculpado y de su compañera sentimental en Muro donde se realizó un registro en la vivienda que ocupan y en una caseta de aperos, siendo intervenidos dos teléfonos móviles, 1.375 euros y restos de droga.