La intervención de dos operarios del servicio eléctrico de Capdepera y dos técnicos de Ambulancias Insulares evitó ayer una posible tragedia en Cala Rajada. Dos niños de 6 y 9 años de edad fueron rescatados del balcón de un segundo piso que estaba en llamas, alrededor de las 11.30 horas de la mañana.
Minutos antes, la madre de los menores había salido un momento para ir al supermercado y los dejó solos. Por causas que se desconocen se inició un incendio en el segundo piso del edificio, ubicado a la altura del número 42 de la calle Isaac Peral. El humo que salía de la vivienda alertó a los vecinos. Los dos menores se arrinconaron en el balcón.
Paulino Ventura y Juan Brunet, los dos técnicos de Ambulancias Insulares estaban fuera de servicio y habían ido al núcleo a arreglar unos papeles. Alertados por los vecinos, acudieron al piso donde también estaban los electricistas que trabajaban con una grúa, con la que se pudo rescatar a los dos niños.
Acto seguido se personaron en el lugar los Bomberos de Artà y la Policía Local de Capdepera. También fue rescatada otra niña de seis años de edad que estaba sola en el tercer piso del mismo edificio. Los Bomberos sofocaron el fuego y los niños, que no sufrieron lesiones, fueron trasladados a un hospital.