La Guardia Civil del cuartel de Artà ha detenido a un hombre de 44 años, que trabajaba en hoteles de Cala Millor, acusado de un total de doce robos en aquel núcleo. La investigación se inició hace un tiempo, después de que los agentes descubrieran una serie de robos en casas y en locales perpetrados con el mismo 'modus operandi', por lo que sospecharon que detrás se encontraba un solo delincuente o una misma banda.
Los asaltos se cometían cuando los pisos o establecimientos estaban vacíos y los ladrones forzaban las ventanas o la puerta para acceder al interior. Una vez dentro, buscaban electrodomésticos, televisores, vídeos y aparatos musicales, algo que llamó la atención de los investigadores, ya que en este tipo de asaltos el botín más preciado son las joyas y el dinero en efectivo.
Las sospechas policiales se centraron en un individuo natural de Motril (Granada) que había realizado trabajos esporádicos en hoteles de la zona como camarero o encargado de los servicios técnicos. La Benemérita averiguó que en esos apartamentos se habían perpetrado robos supuestamente con su 'sello' y fue estrechando el cerco hasta que hace algunos días procedió a su detención. De las pesquisas posteriores se ha averiguado que el material sustraído, supuestamente, lo empaquetaba con destino a la Península, en concreto a su casa de Motril.
Lo que no ha quedado claro es si ese género ilícito era revendido a más bajo precio o cuál era la salida que se le daba a todo ese material, compuesto sobre todo por televisores y vídeos. El detenido ha declarado ante el juez y ha quedado en libertad con cargos.