J.JIMÉNEZ-P.MATAS
El Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil han detenido en
los últimos días, en dos operaciones distintas, a un hombre y una
mujer de nacionalidad alemana que supuestamente habían huido de su
país porque estaban siendo buscados por la Justicia y habían
encontrado refugio en Mallorca.
Robert S. fue arrestado después de que la Interpol se pusiera en contacto con la Jefatura de Policía de Palma y alertara de su supuesta presencia en la Isla. El extranjero se dedicaba a las inversiones en su país y está acusado de estafas por valor de 180.000.000 de pesetas. El pasado martes fue trasladado a los juzgados de Vía Alemania, donde el juez de guardia le informó de las acusaciones que pesaban sobre él y luego ordenó su ingreso en la prisión de la carretera de Sóller.
La otra detenida responde a la identidad de Cornelia Helga L.E., de unos 40 años, y que residía desde hacía un tiempo en la barriada palmesana de Sant Jordi. Las autoridades de la ciudad alemana de Barheim la acusan, junto a su marido, de apropiarse de forma indebida en el año 98 de un equipo musical de una discoteca que estaba valorado en unos 42.000 euros (unos 8.000.000 de pesetas).
Su esposo, Michael Hermans, de su misma edad, ya fue arrestado en Mallorca hace cinco meses, pero en aquella ocasión la Benemérita no sabía que se había afincado en la Isla junto a su mujer. Cornelia fue detenida el lunes y tras declarar ante el magistrado también ingresó en la cárcel. Tanto ella como el compatriota alemán detenido por la policía están pendientes de que la Audiencia Nacional decida su extradición.