Un traficante africano, que llevaba la droga escondida en el cuerpo, ha sido condenado por la Audiencia de Palma a la pena de tres años de prisión. También se le impone una sanción económica de seis mil euros. Se trata de Francis Opoku, natural de Ghana, de 28 años de edad. Este individuo llegó a Mallorca en la mañana del día 5 de diciembre del pasado año. Al llegar al aeropuerto fue identificado por funcionarios de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal de la Guardia Civil (ODAIFI). El individuo había viajado en un avión procedente de Barcelona.
La sentencia señala que al traficante africano se le ocupó 16 mil pesetas y seis bolas repletas de droga. El individuo llevaba estos «dátiles» dentro del cuerpo. Dos de estos envoltorios iban recubiertos con aislante de color negro y los otros cuatro llevaban un elemento transparente. No fue hasta horas después cuando el traficante defecó cuando se comprobó que lo que llevaba dentro del cuerpo era cocaína.
Los análisis, además de confirmar que se trataba de cocaína, indicaron que el porcentaje de pureza de esta droga era del 56 por ciento. De haberse puesto a la venta en el mercado 'negro' se podrían haber obtenido más de mil euros. El acusado, que ingresó en prisión tras las diligencias efectuadas por la Guardia Civil, se confesó culpable del delito que estaba acusado y aceptó cumplir los tres años de privación de libertad en la cárcel de Palma.