Tres días después de haberse descubierto el cadáver de la joven belga Vicky Keler en Manacor, los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de la citada localidad tienen la única hipótesis de que la causa de la muerte fue la asfixia por estrangulamiento. Así, después de los distintos análisis médicos y otras pruebas efectuadas, no se han encontrado datos como para poder sospechar de que la víctima fuera objeto de algún tipo de vejación.
Los datos concretos del hallazgo del cadáver y la detención del supuesto autor no se han hecho todavía públicos de manera oficial, lo que puede suponer todo un récord a nivel internacional de inoperancia tanto a nivel policial como judicial. Por su parte, la juez que incoa el sumario del caso lo ha declarado secreto. Con respecto al detenido, en la comisaría de Manacor se desconocía ayer si la sangre con la que estaba impregnado cuando se le arrestó se la había producido por algún corte él mismo.
Según manifestaron fuentes policiales, ayer tarde estaba previsto efectuar la autopsia al cadáver de la víctima. Los primeros resultados no han trascendido a nivel oficial debido al 'mutismo' que ha ordenado la juez, aunque los investigadores descartan que existieran vejaciones sexuales, y este es un dato que da a entender que se pudo recoger de la practica de la autopsia. En cualquier caso se confirma que la muerte se produjo por causas violentas y todo parece indicar que la acusación del fiscal puede ser por un delito de asesinato.