Los cuerpos de ocho inmigrantes clandestinos, entre ellos dos niños, fueron descubiertos ayer en un contenedor cerca de la ciudad de Wexford (sureste de Irlanda), mientras que otros cinco refugiados han tenido que ser hospitalizados, según informaron fuentes policiales. Los muertos, seis hombres y dos niños, podrían ser naturales de Europa del este, según esta misma fuente. Otros cinco adultos, encontrados vivos en el interior del contenedor, han sido trasladados hacia un hospital de la región. Su estado de salud no ha sido precisado, pero al menos uno de ellos estaría gravemente herido.
Los inmigrantes se encontraban en el interior de un contenedor que transportaba muebles, aparentemente procedente de Italia, según las primeras indicaciones de la policía. Este contenedor había llegado en un carguero al puerto de Belview, cerca de la ciudad de Waterford. Por la mañana fue cargado sobre el remolque de un camión. El conductor oyó ruidos procedentes del interior del contenedor cuando se encontraba en una zona industrial de Drinagh. Los investigadores de la Oficina Nacional para la Inmigración se desplazaron al lugar.