Con las nuevas medidas que la Dirección General de Tráfico pondrá en marcha en enero ya no será posible ver por las carreteras y autopistas de la isla a la tradicional pareja de guardias civiles, que de ahora en adelante deberán patrullar de forma individual.
La iniciativa pretende que los agentes puedan cubrir más territorio y, además, se ha valorado desde el punto de vista disuasorio. Javier Coromina, responsable de la Jefatura Provincial de Tráfico, en declaraciones efectuadas ayer a Ultima Hora radio, explicó que en la actualidad hay unos 200 efectivos del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil destinados en Balears, aunque matizó que con los permisos, las vacaciones o incluso las bajas por enfermedad la plantilla nunca tiene a tantos agentes en las carreteras.
A nivel nacional la Dirección General ha adquirido 300 nuevos vehículos provistos de sistemas de grabación de vídeo, 1.150 cámaras fotográficas y 40 unidades láser más versátiles para detectar exceso de velocidad, pero Coromina no pudo precisar qué cantidad de material se destinará a Balears. En todo caso, será escaso, ya que sólo se aplicarán en la autopista de Inca, la autopista de Palmanova y la autopista del aeropuerto, los tres tramos 'rápidos' de Mallorca.
El jefe de Tráfico, empero, recalcó que no hay que hacer una lectura errónea de las nuevas medidas, ya que no se trata de hostigar o controlar más al conductor «sino de evitar la siniestralidad». Con este paquete de iniciativas la Dirección General pretende modernizar los recursos de este organismo y, en el caso de los motoristas, abarcar más tramos con los mismos efectivos.