Un portero de discoteca de Cala Millor lleva cuatro días ingresado en el Hospital de Manacor después de que fuera salvajemente atacado con una botella rota por dos ciudadanos colombianos a los que negó la entrada al local. La Guardia Civil ha arrestado a los dos sospechosos, y uno de ellos está también hospitalizado por los golpes que Ralf le propinó para defenderse.
La víctima, de mediana edad y nacionalidad alemana, relató a Ultima Hora que los dos agresores «iban bebidos, sucios y mal vestidos» y que por ese motivo en la madrugada del viernes al sábado no les dejó acceder a la discoteca Mágic, en Cala Millor. «Les dije que para entrar era necesaria una invitación y me dijeron en tono amenazante que volverían», contó Ralf. Eran aproximadamente las cuatro y media de la madrugada cuando los dos sudamericanos regresaron armados con una botella de vodka rota, que blandían de forma intimidatoria. El portero apremió a los clientes que hacían cola en la puerta para que entraran en el local, a fin de que nadie resultara herido, y se preparó para afrontar el ataque. «Justo cuando me iban a embestir salió un cliente, intenté hacerle entrar, y en ese momento me clavaron la botella en varias partes del cuerpo», añadió. El portero, con todo, aún pudo repeler el ataque y golpeó con violencia a uno de los colombianos, que resultó gravemente herido.
Testigos de la riña se pusieron rápidamente en contacto con la Guardia Civil, que envió al lugar a varias ambulancias y patrullas. Los agentes del cuartel de Artà detuvieron a uno de los sudamericanos y el otro, al igual que Ralf, fue trasladado al Hospital de Manacor.