La oposición en Cort criticó ayer con dureza las declaraciones efectuadas el martes por el alcalde de Palma, Joan Fageda, en las que habló de las posibles soluciones para intentar resolver el problema de la prostitución, entre ellas, una mayor presión policial y una mayor coordinación entre los diversos estamentos políticos y judiciales. El alcalde de Palma también recibió críticas desde el Govern.
En concreto, el conseller de Treball i Formació, Eberhard Grosske, señaló ayer, en un escrito mandado a Fageda que «hacer un totum revolutum con la inmigración, la prostitución y la delincuencia y diseñar, para el conjunto del paquete, medidas exclusivamente policiacas, es un camino político muy peligroso que conduce inevitablemente a la xenofobia, el enfrentamiento social y al autoritarismo político», dijo.
Por su parte, el portavoz del PSIB-PSOE en Cort, Antoni Roig, criticó «las declaraciones alarmistas de Fageda mezclando prostitución y moratoria, inmigración y delincuencia», dijo, y añadió: «Entre las posibles soluciones estarían una mayor presencia policial y coordinada de los tres cuerpos, vallar los solares y mejorar la iluminación en la Platja de Palma o mejorar la ordenanza municipal», resumió.
Sebastià Serra, portavoz del PSM-EN, se pronunció en la misma línea y señaló que su grupo pedirá «a los responsables de las diferentes áreas, social, sanitaria, educativa y policial, que expongan cómo están actuando en este tema». EU-EV señaló que la solución del problema se ha de abordar desde «una visión integral, con una coordinación entre instituciones públicas y con dotaciones presupuestarias que permitan programas de atención social».