Un chalet de Cala Llombards, en el término de Santanyí, fue asaltado en la madrugada de ayer por dos delincuentes alemanes que tras amordazar a los propietarios registraron la vivienda en busca de joyas y dinero. Éste es el segundo atraco de estas características que se registra en Mallorca en las últimas dos semanas, después del asalto a la mansión de Hasso en Valldemossa.
En aquella ocasión también fueron dos individuos germanos, armados, los que amordazaron y agredieron al millonario y a su enfermera. Tras encerrarlos en una habitación se apoderaron de 36 millones de pesetas y escaparon a bordo de un coche. El de ayer, sin embargo, no guarda tantas similitudes como pudiera parecer con el robo en la casa de Hasso.
De hecho, los investigadores creen que se trata de delincuentes comunes y que los dos malhechores se introdujeron en la vivienda de Cala Llombards pensando que sus moradores, un matrimonio joven, se encontraban ausentes. Según parece, los dueños les sorprendieron en el interior y los asaltantes reaccionaron violentamente: les maniataron y amordazaron pero no les golpearon. Luego buscaron dinero por todas las dependencias y al final huyeron con un botín escaso. El matrimonio consiguió liberarse y pedir ayuda y la Guardia Civil se hizo cargo de las diligencias. Los miembros de la Policía Judicial se desplazaron hasta el chalet y tomaron declaración a las víctimas. Estas personas pudieron facilitar las características físicas de los dos implicados.