J.JIMÉNEZ
El incendio que desde el pasado miércoles ha quemado entre 80 y 100
hectáreas de pinar y matorral en la localidad de Sant Vicent, en
Eivissa, permanecerá activo en diferentes focos aislados hasta, al
menos, hoy por la mañana, aunque las brigadas terrestres y los
medios aéreos lograron ayer estabilizar el perímetro. Durante la
jornada de ayer casi un centenar de personas, integradas en
diferentes brigadas, trabajó para sofocar el fuego, que debido a la
espesura de la vegetación y al ligero viento racheado se reproduce
con facilidad.
Además, el paraje donde se registró el incendio, conocido como Pla de ses Formigas, presenta un relieve muy escarpado, lo que obligó al uso de tres hidroaviones tipo «Canadair», un «Airtractor», un «Dromader» y los dos helicópteros al comienzo de la jornada, aunque dos de los primeros regresaron posteriormente a sus bases en Madrid y Sevilla. Los equipos terrestres estuvieron integrados por personal de los Bomberos de Eivissa, el Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat), la Guardia Civil, el Ejército y la Policía Local de Sant Joan (municipio al que pertenece San Vicent).
Por la noche estaba previsto que algunas brigadas mantuvieran retenes para evitar que se reactivaran las llamas en los frentes norte y oeste, cuyo avance fue controlado. Los técnicos del Ibanat confían en que las llamas puedan controlarse definitivamente hoy para iniciar las tareas de extinción completa del incendio y la investigación sobre su origen.
La consejera de Medio Ambiente, Margalida Rosselló, declaró en Eivissa que, «según las primeras hipótesis» el incendio ha sido intencionado, puesto que se inició «en tres puntos distintos». Por otra parte, ayer quedó definitivamente sofocado el siniestro forestal que el jueves se declaró en una zona de pinar en Alcúdia. El origen fue una chispa de una máquina radial en una obra próxima a la gravera de Can Sion.