El fiscal Jaime Guasp pidió ayer una condena de 24 años de prisión para una pareja acusada de abusar de tres hijas de la mujer. El juicio contra Rogelio C.R. y Damiana A.H. concluyó ayer en la Audiencia de Palma. A la mujer, además de acusarla de ser cómplice de los delitos sexuales, el fiscal le imputa un delito de abandono de familia, y pide que se le retire la patria potestad durante un periodo de seis años. Los dos acusados, defendidos por los abogados Emilio Morales y Joana Mercadal, mantienen su inocencia. Acusan a la hija mayor de haberse inventado los hechos porque la pareja se negó a permitirle emanciparse cuando ella contaba con sólo once años de edad.
El fiscal, sin embargo, mantiene que el acusado, desde el año 1987, se dedicó a abusar de las hijas de su compañera sentimental. La mayor de ellas comenzó a sufrir estos hechos desde que tenía siete años, según la acusación, que cree que su padrastro la intentó violar en dos ocasiones, pero no lo logró debido a la resistencia que opuso.
El fiscal se mostró ayer muy duro con la actitud que ha mantenido la madre. Afirma que su hija mayor le comentó lo que estaba sufriendo y, aún así, ella no tomó ninguna medida para que no se repitieran los hechos. También afirma el fiscal que la acusada intentó que sus hijas no denunciaran a su compañero. El fiscal también acusa a la mujer de un delito de abandono de familia, porque entiende que ella es la responsable de la «caótica» situación que se vivía en su casa. «Las tres hijas estaban desamparadas y su madre permitía que estuvieran de madrugada por la calle».