La adolescente de 14 años que apareció con el cráneo destrozado el pasado domingo en la localidad de Campo de Criptana (Ciudad Real), Inmaculada Arteaga, fue enterrada a primera hora de la tarde de ayer en el municipio conquense de Vara del Rey, pueblo natal de la madre de la joven.
Previamente al entierro, la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Campo de Criptana acogió una misa funeral por el alma de la joven a la que acudieron cientos de personas, entre ellos numerosos jóvenes, amigos y compañeros de instituto de la fallecida. Al oficio religioso acudió también el subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, Jaime Lobo, para acompañar a la familia «en estos momentos tan dolorosos».
Lobo aseguró que la Policía trabaja «intensamente» en el caso, dijo que las investigaciones «van por buen camino aunque no se pueden revelar detalles que están bajo secreto de sumario» y negó que se hayan producido detenciones. Añadió que «hay muchas hipótesis abiertas» y pidió a los ciudadanos que «tengan paciencia y colaboren con la Justicia para comunicar cualquier detalle que pudieran ver u oír y que con seguridad será muy importante».