El asesinato de la viuda alemana de sa Mola, cometido el pasado 5 de enero, está cada vez más cerca de esclarecerse por completo. Ayer ingresaron en prisión otra presunta encubridora y un cómplice y sólo queda detener al autor material de las puñaladas, que ha huido a Filipinas.
El 19 de febrero fue arrestada Flor Sespida, otra presunta encubridora, que ingresó en el centro penitenciario por 'dar cobertura' a los implicados en el crimen. El cerco se fue estrechando y el pasado jueves fueron apresados Virginia G.A., una española de origen filipino de 49 años, asistenta del hogar en el chalet de la asesinada, y Denis B., un filipino de 36 que acompañó al asesino hasta la casa de la víctima ese 5 de enero. Denis también trabaja como asistente en un chalet de Son Vida y es el novio de una sobrina de Felino S.D., el homicida huido.
La historia se complica aún más, ya que Virgina fue compañera de Felino y rompió la relación poco antes del asesinato, debido a que le acusaba de entenderse con otra mujer, en concreto con la primera detenida, Flor Sespida. Según la declaración de ayer de Denis ante el juez, el día de los hechos Felino le pidió que le acompañara hasta el chalet de sa Mola, porque quería hablar con Virgina. Antes pararon en una tienda del Port d'Andratx y compraron un ramo de flores. La intención de Felino, presumiblemente, era reconciliarse con la asistenta del hogar filipina, pero quien abrió la puerta fue Irmela Regina Femmer, una acaudalada viuda alemana que había contratado a Virginia.
Lo que pasó entonces entre el filipino y la señora no ha trascendido, pero todo parece indicar que entablaron una violenta discusión. Denis esperó fuera, según ha sostenido ante el juez, y se enteró de lo ocurrido cuando su amigo salió a toda prisa del chalet, tras dar muerte a la alemana. El cónsul de Filipinas en España, Juan Torrente, estuvo presente ayer en el juzgado de instrucción número 1, cuando el juez Juan Manuel Sobrino tomaba declaración a los encausados. El diplomático expresó su opinión de que el autor material del asesinato no robó nada en la casa de Irmela Regina, ya que allí aparecieron joyas y un reloj de diamantes. Además, se sabe que al día siguiente del apuñalamiento Felino se presentó a trabajar como friegaplatos en un restaurante y que con el dinero del jornal compró el billete de avión hacia Madrid.
La fiscal Amparo González, tras escuchar la versión de Denis y Virgina, solicitó el ingreso en prisión de ambos, trámite que se formalizó horas después. El asistente fue asesorado por el letrado Eduardo Valdivia y la filipina por el abogado Guillermo Pou. El juez mantiene de momento el secreto de sumario.