El fiscal Miguel Àngel Anadón solicita penas que suman 50 años de cárcel para cinco jóvenes, que fueron detenidos hace dos años en Palma acusados de tráfico de éxtasis. La policía les intervino un paquete, que fue enviado desde Holanda, que contenía dos mil pastillas. Los acusados, Arne W.H. (holandés), Feliciano C.C., José Antonio B.B., Daniel J.B., y Lucía C.C., se negaron ayer a declarar.
La policía investigaba a estos individuos y se solicitó autorización para intervenir sus teléfonos. Se pensaba que se dedicaban a distribuir éxtasis por los locales nocturnos.
Coincidiendo con la investigación en la frontera alemana se interceptó un paquete, enviado desde Holanda, que debía ser entregado a un domicilio de Palma, a nombre de Daniel J.B. La policía alemana planteó la posibilidad de realizar una entrega controlada. El paquete fue enviado a Palma y se abrió en presencia del juez. Se comprobó que, camufladas entre golosinas, el envoltorio contenía dos mil pastillas de éxtasis. Con autorización del juez se confeccionó un nuevo paquete, en el que no había droga, y se entregó a la empresa de transporte. La policía controló la entrega del envoltorio. A la empresa fueron tres de los acusados. Al comprobar que no contenía nada lo tiraron a un contenedor, pero la policía les detuvo. A uno de ellos se le intervino un ordenador. Se comprobó que lo utilizó para controlar el trayecto que realizó el paquete desde Holanda a Mallorca a través de internet.