Dos hermanos, de trece y ocho años de edad, respectivamente, desaparecieron ayer tarde en el mar junto a un acantilado de Alcúdia. Los dos menores, llamados Àngel y Marc, acompañaban a su padre, Jordi Gil, en una excursión que estaban realizando por los alrededores de una cueva, que está situada entre el Coll Baix y el cabo de Menorca. Según las primeras informaciones, los familiares son residentes de la localidad de Esporles.
Sobre las 18.20 horas de ayer se recibió un avisó en el centro de emergencias del 112 que avisaba de un grave suceso en esta zona de la costa norte de Mallorca. La comunicante era una mujer, madre de los dos niños desaparecidos, que informaba que su marido había tenido un grave percance cuando atravesaba la cueva de sa bassa blanca, junto al cabo de Menorca. Fue el propio marido quien había llamado por teléfono a su esposa, diciéndole que una ola había arrastrado a los dos niños al fondo del mar y que ambos habían desaparecido. En esta llamada le solicitaba que pidiera ayuda para iniciar el rescate de los dos pequeños. De inmediato se puso en marcha un operativo de búsqueda y salvamento. En esta operación participaron más de 30 personas, pertenecients a los voluntarios de la Cruz Roja de Sóller, de la Policía Local, del equipo de montaña de los bomberos del Consell Insular, Guardia Civil, Protección Civil y Salvamento Marítimo.
Según parece el hombre no se encontraba junto a los dos niños cuando fueron arrastrados hacia el mar, pero a los pocos segundos se dio cuenta de lo que les había pasado e intentó ayudarles. Pese al fuerte temporal lo cierto es que el padre se lanzó al agua desde lo alto del acantilado para intentar ayudar a sus dos hijos. Jordi Gil explicó que antes de lanzarse al mar había visto a su hijo menor, que intentaba salir a flote, pero cuando estuvo dentro del agua le perdió de vista y no volvió a verle más. El hombre estuvo varias horas en el mar buscando a los dos pequeños, hasta que decidió pedir ayuda.
Afortunadamente el hombre sí pudo salir del agua y agarrarse a una roca. Fue rescatado anoche. Presentaba, además de un profundo estado de shock, síntomas de hipotermia y lesiones leves. Una ambulancia del 061 lo trasladó anoche al hospital de Son Dureta, donde los médicos le atendieron de estas lesiones que sufría.